Nuestra comunidad educativa vivió una jornada profundamente significativa y llena de alegría, el viernes 3 de octubre pasado, ocasión en que cinco alumnos recibieron el sacramento del Bautismo, acompañados por sus familias, padrinos, amigos y miembros de la comunidad escolar.
La celebración, presidida por nuestro diácono Leonardo Fernández, comenzó con el simbólico gesto de tocar la puerta de la capilla, signo de apertura y acogida a la vida de fe. Con emoción, el diácono preguntó a los padres y padrinos:
—¿Qué vienen a pedir a la Iglesia de Dios?
A lo que ellos respondieron con fuerza y convicción:
—El Bautismo para nuestros hijos y ahijados.
En un ambiente de alegría y esperanza, los niños fueron consagrados hijos e hijas de Dios, iniciando así su camino en la comunidad cristiana. Las familias, unidas en oración, agradecieron la oportunidad de vivir este momento en el marco de nuestra comunidad educativa, que promueve la formación integral desde la fe, los valores y el acompañamiento.
Con gratitud y alegría, pedimos que el amor de Dios bendiga a cada niño y a sus familias en este nuevo camino de fe, y que San Rafael los acompañe para guiar a sus hijos bajo la luz del Evangelio.
